martes, 3 de noviembre de 2009

Correr bajo la lluvia.

Corría bajo la lluvía con la punta de los pies empapados, con las manos tan frias que apenas tenía tacto ya, y la nariz... humedecida por las gotas que esquivaban el paragüas y llegaban a estrellarse en su cara. Se notaba que a pesar de todo aún mantenía un ápice de esperanza, había remendado la última herida de su corazón con una tirita que revoloteba por su bolso, quería pensar que sería suficiente para recuperar su sonrisa, aunque su cabeza intentara decirle lo contrario, ella no la quería escuchar.
La calle mojada, su alma tambien, llena de buenos recuerdos, de amor y de dolor tambien. Aceleraba el paso, no había tiempo que perder, no quería llegar tarde de nuevo a pedir perdón, como otras veces le pasó. Sengía que su tiempo se agotaba y se ahogaba en el agua por el que caminaba, "tengo que llegar", se decía, mientras limpiaba de sus ojos las lágrimas que habían quedado confundidas con la lluvia. Miró su reloj una vez más... "no me puedo demorar", saltó el charco y se encontró de bruces con él...

No hay comentarios:

Publicar un comentario